(Tekax, Yucatán, abril 3 de 1887 – México, D.F. enero 30 de 1944)
Notable trovador y compositor. Se dice que aprendió la guitarra oyendo tocar a su padre Bernabé Hernández Palmerín. Hacia fines de 1914 compone su primera canción “Hay una virgen” con versos de Lord Byron, unos años después forma su primer quinteto con Pepe Sosa, Luis Basulto, Alonso Quijano y Chucho Herrera, con los que se integra a la trova de la Plaza Grande. Da clases de guitarra y de ahí lo conocen los niños Guty Cárdenas y Chalin Cámara en los que despierta admiración por su arte.
Asimiló el ritmo del bambuco antioqueño traído a Yucatán por el dueto colombiano de Pelón y Marín (Pedro León Franco y Adolfo Marín), en 1908, y lo incorporó al repertorio yucateco. En ese ritmo musicalizó; “El rosal enfermo”, “Semejanzas”, “Novia envidiada”, “Flores aladas”, “Dos azules mariposas”, “Claveles”, “Albura de magnolias”, “Que entierren mi cuerpo”, “El crucifijo”, “Las dos rosas”, “Neblina”, “Paloma de dónde vienes”, “Yo no quiero que llores” y otras más.
En 1922 en colaboración con Luis Rosado Vega compone “Flores de mayo”, “Las golondrinas” y “ Xkokolché”, en febrero de 1923 musicaliza la legendaria “Peregrina” , a solicitud del gobernador Felipe Carrillo Puerto que se la dedicó a la periodista norteamericana Alma Reed.
En ritmo de bolero compuso “Cuando ya no me quieras”, “En el fuego de tus ojos”, “Las tres glorias” ”Lindísima morena”, en ritmo de clave: “Yo sé de un ave”, “Qué será lo que sueñas”, en danza, “Mi tierra”, “Languidece una estrellita”.